1 Tim 4,4-8;16: Hijo, Timoteo, toda criatura de Dios es buena, y no se debe rechazar nada, sino que hay que tomarlo todo con acción de gracias, pues es santificado por la palabra de Dios y la oración. Si propones estas cosas a los hermanos, serás un buen servidor de Cristo Jesús, nutrido con las palabras de la fe y de la buena doctrina que tú has seguido tan atentamente. En cambio, evita las fábulas profanas y propias de ancianas. Ejercítate en la piedad. El ejercicio corporal aprovecha para poco, mientras que la piedad aprovecha para todo. Tiene la promesa de la vida, la presente y la futura. Cuida de ti mismo y de la enseñanza. Sé constante en estas cosas, pues haciendo esto te salvarás a ti mismo y a los que te escuchan.
Fuente: Sagrada Biblia de la Conferencia Episcopal Española